Buscando sobre la antigua Casa de Correos, sede actual en la Puerta del Sol del gobierno madrileño, he encontrado el epigrama que copio a continuación. Por lo visto, el reloj de la torre del edificio, el famoso del rito tonto de las uvas de Nochevieja —rito doblemente tonto ahora que, según cuentan en Antena a las 3, a una panda de capullos les ha dado por celebrar las preuvas a las 12 de la mañana—, funcionaba mal, y empezó a circular la copla.
Este reló fatal
que hay en la Puerta del Sol,
dijo un turco a un español,
¿por qué anda siempre tan mal?
El turco, con desparpajo,
contestó cual perro viejo:
este reló es el espejo
del gobierno que hay debajo.
que hay en la Puerta del Sol,
dijo un turco a un español,
¿por qué anda siempre tan mal?
El turco, con desparpajo,
contestó cual perro viejo:
este reló es el espejo
del gobierno que hay debajo.
Creo que ahora funciona bien el reloj, con lo que la sátira habría quedado obsoleta. Quizás la castiza Presidente madrileña conociera la burla cuando se le ocurrió hace unos años, en una de esas campañas informativas, o séase propagandísticas, el eslogan publicitario, referido a la Comunidad: Espejo de lo que somos, que alguien cambiaba en los carteles por: Espe jode lo que somos.