Ya me he encontrado con dos oficinas de esta entidad cerradas, sólo por la zona por donde ando habitualmente, por lo que deduzco que no serán las únicas en Alcorcón.
El cartel azulón que avisa del cierre no dice que sea por vacaciones, sino algo así como: "por razones temporales" —¿ahora se dice así?—, "esta oficina permanecerá cerrada del 3 al 28 de agosto", prácticamente el mes de agosto, teniendo en cuenta que el 1 fue sábado y el 30 es domingo. (Los sábados no abren por estar en horario que llaman "de verano" y que va desde el 1 de abril al 30 de septiembre). Si esas "razones temporales" no son vacaciones, entonces no se qué son.
Es la primera vez que veo que un banco cierra por vacaciones. El hecho es que a mí ya me ha causado trastornos, a pesar de lo que el cartel avisa de que "con el fin de garantizar y prestar un mejor servicio a nuestros clientes, estamos a su disposición en nuestra oficina más cercana en la calle... ". Y aquí la dirección de otra agencia que, en el mejor de los casos, está como a 20 minutos, contando ida y vuelta desde la cerrada.
La inconsecuencia interna del cartelito no puede ser más clara, porque ¿qué tendrá que ver el que haya otra oficina abierta con los problemas que uno se encuentra al darse con la puerta en las narices de otra cerrada? ¿Qué quieren decir? ¿Que todavía podía haber sido peor si las hubieran cerrado todas? Y es que no saben cómo dorarle la píldora al cliente. A todo esto, en ambas oficinas cerradas, de los dos cajeros que cada una tiene, uno de ellos está "fuera de servicio". Vamos, que no funciona.
P. S. Son, más o menos, las 7,30. Estoy, frente a la ventana abierta de mi habitación, preparando este apunte, y desde la calle me llega la tufarada de las llamadas "islas ecológicas" ("¡Qué verde era mi valle!" y el Ayuntamiento de Alcorcón también). No, de esto no tiene la culpa el banco. Creo.
El cartel azulón que avisa del cierre no dice que sea por vacaciones, sino algo así como: "por razones temporales" —¿ahora se dice así?—, "esta oficina permanecerá cerrada del 3 al 28 de agosto", prácticamente el mes de agosto, teniendo en cuenta que el 1 fue sábado y el 30 es domingo. (Los sábados no abren por estar en horario que llaman "de verano" y que va desde el 1 de abril al 30 de septiembre). Si esas "razones temporales" no son vacaciones, entonces no se qué son.
Es la primera vez que veo que un banco cierra por vacaciones. El hecho es que a mí ya me ha causado trastornos, a pesar de lo que el cartel avisa de que "con el fin de garantizar y prestar un mejor servicio a nuestros clientes, estamos a su disposición en nuestra oficina más cercana en la calle... ". Y aquí la dirección de otra agencia que, en el mejor de los casos, está como a 20 minutos, contando ida y vuelta desde la cerrada.
La inconsecuencia interna del cartelito no puede ser más clara, porque ¿qué tendrá que ver el que haya otra oficina abierta con los problemas que uno se encuentra al darse con la puerta en las narices de otra cerrada? ¿Qué quieren decir? ¿Que todavía podía haber sido peor si las hubieran cerrado todas? Y es que no saben cómo dorarle la píldora al cliente. A todo esto, en ambas oficinas cerradas, de los dos cajeros que cada una tiene, uno de ellos está "fuera de servicio". Vamos, que no funciona.
P. S. Son, más o menos, las 7,30. Estoy, frente a la ventana abierta de mi habitación, preparando este apunte, y desde la calle me llega la tufarada de las llamadas "islas ecológicas" ("¡Qué verde era mi valle!" y el Ayuntamiento de Alcorcón también). No, de esto no tiene la culpa el banco. Creo.
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